Cumpliendo con las medidas de seguridad propuestas en el plan de retorno progresivo a la Universidad de La Frontera, se llevó a cabo la entrega de la Beca Janson al grupo de estudiantes que fue seleccionado por la Red de Donatarios UFRO. De esta manera, se conmemoró la memoria de quien fue Hugo Quezada Moraga, quien a través de su espíritu de resiliencia y superación marcó la vida de sus compañeros/as de carrera, quienes sintieron el llamado de crear una acción solidaria que represente un tributo al esfuerzo, responsabilidad, perseverancia, empatía y solidaridad.
Esta iniciativa nace el 2018 gracias a la inquietud solidaria de constructores civiles titulados y tituladas de la ex Universidad Técnica del Estado y la Universidad de La Frontera, quienes decidieron darle un sentido más social a las juntas que realizaban anualmente; por lo que se articularon con el equipo de profesionales de Bienestar Estudiantil de la DDE para crear un beneficio que fuera en ayuda de estudiantes de Ingeniería en Construcción UFRO.
REENCUENTRO
En la primera ceremonia presencial desde el inicio de la pandemia, los asistentes tuvieron la oportunidad de compartir un grato momento, evocando la figura de quién fue Hugo “Janson” junto a su familia, personal administrativo, autoridades académicas y becados.
El director de la Dirección de Desarrollo Estudiantil, Alex Seguel, en la ceremonia enfatizó que como unidad destacan y valoran el compromiso humano adquirido por los donatarios con la comunidad de su alma mater, promoviendo la solidaridad y responsabilidad social como sello del estudiantado UFRO: “nos volvemos a encontrar luego de mucho tiempo. Como equipo, estamos contentos no solo por la entrega de este beneficio, sino también porque se trata de la primera ceremonia presencial desde 2019. El sentido de este beneficio nos da la motivación para seguir trabajando como DDE en este programa de acompañamiento integral que hemos desarrollado los últimos años”.
Roberto Quezada Caniulén, hijo de Hugo Quezada “Janson”, quien también fue invitado a la actividad, señaló que es un honor saber que se toma en cuenta la experiencia de vida y el sacrificio que encarnó su padre para culminar sus estudios.
“Llegó sin nada a estudiar. Trabajaba todos los días para tener alimento y techo, sus cosas para la universidad. Al no tener con qué pagar nada, durmió en los vagones de la estación de trenes y fue ahí cuando sus amigos le dijeron que podía tener ayuda a través del Hogar Indígena”. Roberto señala que esto le permitió consolidarse para tener un buen desempeño académico.
“Estoy muy agradecido de ver que todo esto ha sido valorado. Es emotivo saber que luego de su fallecimiento le dedicaron este homenaje. Me enorgullece saber que su legado no ha muerto, ni va a morir”.
BECAD@S
Desde 2018 a la fecha, la red de donatarios ha becado a 12 estudiantes de la carrera de Ingeniería en Construcción, quienes han sido seleccionados/as por su buen rendimiento académico y encontrarse en una situación económica vulnerable. En esta oportunidad se becó, por primera vez, a Catalina Malinowski Morales, estudiante de 4to año, y a Matías Oyarce Díaz, estudiante de 2do año. Además, se renovó el beneficio para el estudiante de 5to año, Javier Muñoz Contreras, quién ha sido becado desde 2018.
Matías Oyarce, estudiante becado por primera vez con este beneficio, fue el encargado de entregar unas palabras en representación de sus compañeros, y a modo de agradecimiento, por el noble y desinteresado gesto de los y las constructoras civiles que han dado vida a esta acción: “que este ejemplo de vida nos sirva a nosotros como estudiantes para afrontar de mejor manera la adversidad y que sea un estímulo para lograr el objetivo de ser profesional”.
Revisa parte de la ceremonia aquí
¿Quieres ser donatari@? para más información sobre estos beneficios, puedes comunicarte con Cristina Munro a
“Janson” era el apodo de Hugo Quezada Moraga, profesional que se desempeñó como director de SECPLAN y ejerció funciones en la Subrogancia de la Dirección de Obras de la Municipalidad de Lanco hasta el año de su deceso (2013). Sin embargo, no fue su ejercicio de la profesión lo que caló hondo en la vida de los y las compañeras que decidieron homenajearlo a través de esta beca, sino su historia de vida y cómo su espíritu resiliente le permitió superar las adversidades. El legado de vocación, esfuerzo y motivación en sus años de estudio, sirvió de inspiración a sus ex compañeros de carrera para nombrar un beneficio que destaca y reconoce el buen rendimiento académico.
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