En su versión 2021, el tradicional Concurso de Tesis de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) sede Temuco, denominado “Mejor Proyecto de Titulación”, premió con el primer y segundo lugar dos trabajos presentados por estudiantes de Ingeniería en Construcción de la Universidad de La Frontera (UFRO).
Con el primer lugar, fue distinguido el trabajo “Influencia del biochar proveniente de cáscaras de avena en las propiedades del ligante asfáltico y el desempeño de la mezcla asfáltica”, desarrollado por Camila Martínez Toledo y guiado por el Dr. Gonzalo Valdés Vidal.
En tanto, con el segundo lugar fue reconocida la tesis: "Desarrollo de un material aislante térmico basado en botellas recicladas de politereftalato de etileno (PET)”, perteneciente a la estudiante Claudia Campos Gallardo, quien tuvo como docente guía al Dr. Juan Pablo Cárdenas Ramírez.
Sobre la obtención del primer lugar, Camila Martínez no duda en describirlo como un gran logro académico y profesional, “mi tesis significó varios meses de trabajo, estudio y perseverancia, donde las circunstancias producto de la pandemia, tampoco fueron las ideales. Por otro lado, este tipo de instancias resultan sumamente provechosas para mostrar que los jóvenes estamos comprometidos con nuestra región a través de la investigación y la innovación, demostrando que podemos aportar con ideas y soluciones que nos beneficien y que pueden ser aplicadas, tanto en el sector público como privado”.
Específicamente, su investigación, que se enmarcó en un proyecto Exploratorio de Investigación patrocinado por la MacroFacultad de Ingeniería (integrada por las Universidades de La Frontera, Bío-Bío y de Talca) y desarrollado con aportes de CORFO y la empresa CLASA S.A., tuvo por objetivo general determinar la concentración óptima de biochar (o biocarbón) proveniente de cáscaras de avena para modificar cemento asfáltico convencional de tipo CA-24. Esto, involucró un estudio experimental de las propiedades del cemento asfáltico modificado con biochar, además de efectuar un análisis de su efecto en las propiedades críticas de desempeño de la mezcla asfáltica.
Al respecto, Camila explica que “de acuerdo con los resultados de la investigación, se encontró que el biochar permite aumentar la viscosidad y el rango viscoelástico del cemento asfáltico. Esto quiere decir, que el cemento asfáltico con adición de biochar, es más resistente que un asfalto convencional al evaluarlos a una misma temperatura de servicio. Además, se determinó que el módulo de rigidez y la resistencia a las deformaciones permanentes aumenta con la presencia del aditivo, mientras que la resistencia a la fisuración térmica y la sensibilidad al agua se mantienen con la adición de hasta 2,5% de biochar”.
A lo anterior, agregó que “este trabajo involucra a los pequeños y grandes agricultores de la zona, haciéndolos partícipes de la utilización y el aprovechamiento de cáscaras de avena para transformarla en un modificador de cemento asfáltico. De este modo, se obtendría un biomodificador local y accesible que, al mismo tiempo, permitiría mejorar las propiedades de los pavimentos asfálticos, haciéndolos menos susceptibles a la aparición de determinados modos de falla en la estructura, otorgando caminos más duraderos, seguros y a un menor costo tras la disminución de las actividades de mantención y rehabilitación”.
Camila también destaca que “la valorización de la cáscara de avena como modificador de cemento asfáltico también implica beneficios medioambientales y económicos, al fomentar la economía circular en la agroindustria regional”.
Por su parte, el trabajo de Claudia Campos consiste en la fabricación de un material aislante térmico para viviendas, a partir de botellas de politereftalato de etileno (PET). En sus palabras, dice que “es un proceso de suprareciclaje, de forma mecánica, donde las botellas se convierten en un material muy similar a la lana de vidrio (aislante comercializado actualmente). El principal beneficio de este trabajo, es aportar, de manera sustentable, al desarrollo de nuevas tecnologías aislantes. Si bien es un proceso que aún hay que trabajar, aporta en la disminución de material particulado y de residuos plásticos”.
Si bien Claudia confiaba que su proyecto podría ser reconocido en este concurso, “sinceramente no esperaba obtener algún lugar, pero es bueno que se reconozca este tipo de ideas y la innovación que hay en los proyectos nuevos… y, sin duda, este segundo lugar lo considero muy importante, pues es una puerta que se abre a nuevos concursos y a seguir desarrollando el proyecto para obtener, cada vez, un mejor resultado. Estoy muy agradecida por el reconocimiento y motivada de seguir trabajando”.
La Cámara Chilena de la Construcción sede Temuco, a través de su Comisión Educación Empresa, invita anualmente a estudiantes de Casas de Estudios de últimos niveles de las carreras profesionales y técnicas del área de construcción, arquitectura o equivalente, a participar del Concurso “Mejor Proyecto de Titulación”, siendo esta una valiosa oportunidad para compartir, con la comunidad, el desarrollo científico-tecnológico que se está llevando a cabo al interior de las universidades y que involucra, de manera temprana, a las y los futuros profesionales de la región.